Una vez empiezas a operar como autónomo es obligatorio presentar declaraciones trimestrales, anuales y registro de distintos libros. Para evitar problemas, es posible descargar el calendario del contribuyente de la web de Hacienda o delegar en un profesional. Pero hoy, te queremos contar cuales creemos que son los 8 errores de gestión más comunes entre los autónomos.
Planificación
En tu andadura como freelance, te encontrarás con declaraciones trimestrales y anuales, dependiendo del tipo de autónomo que seas. Nuestro consejo es que revises con frecuencia las notificaciones telemáticas.
Debes acostumbrarte a realizar una previsión adelantada de cuánto tendrás que pagar a final del trimestre, Esto te permitirá tomar mejores decisiones. Así podrías, adelantar compras que supongan gastos deducibles, retrasar un proyecto para emitir la factura en el trimestre siguiente o solicitar un aplazamiento del pago del IVA/IGIC, entre otros.
Como autónomo puedes llegar a presentar a la AEAT hasta 11 modelos distintos, entre trimestrales y anuales. No presentarlos a tiempo te puede conllevar consecuencias económicas.
Las demoras suponen un sobrecoste del 5% al 20% sobre la cifra adeudada, dependiendo de cuanto te hayas pasado del límite de tiempo. En caso de no facilitar a Hacienda alguna declaración informativa relevante sobre la actividad se pueden afrontar hasta 150€ de multa.
Curiosamente, lo más habitual es que se presenten los impuestos unos días antes de la fecha límite, sin saber cuál será el resultado fiscal. A veces, pueden llegar a ser importantes sumas de dinero, para las que te hubiese venido bien solicitar apoyo bancario o pedir una demora.
Software de Gestión
Llevar las cuentas manualmente es una forma obsoleta de gestión. Automatizar la gestión aumenta la eficiencia y optimiza el tiempo. En Sagiges tenemos Software de gestión especialmente diseñados para autónomos y Micropymes, que harán tu día a día más sencillo. Además nuestros Software de código abierto nos permiten adaptarnos a tus necesidades y las de tu empresa.
Libros contables
La actividad frenética del día a día te puede impedir mantener actualizados los libros contables. Debes registrarlos en función del régimen de tributación de la actividad económica. No mantener los libros al día, te puede dificultar la conciliación bancaria y el pago de impuestos.
Por suerte este es un problema que se alivia con un buen programa contable.
Unificación de cuentas bancarias
Este es un error muy común entre los autónomos. Disponer de una única cuenta bancaria para tus gastos personales y profesionales te dificultará el control de tu economía.
En nuestro Blog disponemos de un Post hablando exclusivamente de las Cuenta Autónomos, así que no vamos a darle más vueltas aquí.
Conciliación bancaria
Este error está relacionado con el anterior. No debes olvidar cotejar los registros en los libros contables con la cuenta bancaria y el efectivo. Esto podría provocar el caos en tu contabilidad. Mejor invertir tiempo en revisar cada apunte y cotejarlo con los gastos e ingresos del libro para evitar descuadres y disgustos. Un buen programa contable te ayudará.
Recopilación de tickets
¡Guarda todas las facturas a deducir!
Este es uno de los errores más habituales. La AEAT puede reclamarte en cualquier momento las facturas de los últimos años. Los cambios de criterios sobre lo que es amortizable o no a menudo causan confusión, por eso hay que tener cuidado con la liquidación trimestral del IVA/IGIC, consulta a tu Asesor él seguro te orientará adecuadamente.
Recibos bancarios
Existen gastos que son fiscalmente deducibles aunque no dispongan de una factura. Por ejemplo, la cuota de autónomos o la primas de seguros. En estos casos el documento justificativo para la deducción es el recibo bancario, de nuevo te aconsejamos un buen asesoramiento fiscal.
Ayuda de un experto
Si crees que no vas a ser capaz o que no vas a disponer del tiempo necesario para ocuparte de todo, lo mejor es que contrates los servicios de un profesional. Así dispondrás del respaldo de un asesor que te oriente con los trámites administrativos.
Puede suceder que realices un pequeño cambio en tu actividad y esto conlleve un cambio en tus obligaciones fiscales. Es muy fácil no darse cuenta de que necesitas presentar un nuevo modelo. Si de repente alquilas un local para ejercer tu actividad, eso te obliga a presentar el modelo 115. Pero si realizas un gasto de proveedores europeos, necesitas presentar el modelo 349, por ejemplo.
En nuestra opinión, un asesor es un gasto más que amortizable.
¿Qué te ha parecido nuestro recopilatorio de los 8 errores de gestión más comunes? ¿Te has sentido identificado con alguno de ellos? Puedes dejarnos tu opinión en la caja de comentarios.